Me gusta...comprobar que soy un (poco?) friki.

miércoles, 16 de julio de 2014

ME GUSTA

Como siempre digo si eres algo, asumelo rápido...es menos doloroso. Se que soy friki o por lo menos un poquito. Si lo pienso creo que para los frikis no soy friki, pero si lo soy para los que no lo son. ¿Me he explicado? no...bueno pues vuelvan a leerlo hasta que me explique bien.

El caso es que hay ocasiones en que cuando pienso algo o digo algo...se para el tiempo...mi yo interior sale de mi cuerpo...me mira y dice..."pero mira que eres raro". Hay algún motivo para que os cuente esto...bueno...es mi blog y no necesito tener una excusa para escribirlo...pero la hay.

Hace unos días estaba en el Parque Tecnológico de Zamudio cuando me encontré con este edificio:


Cuando lo vi lo que me vino a la cabeza fue: "¡Joder! La armada imperial nos invade". Mi sentido común impidió que lo dijera en alto. Pero mi yo interior si lo escucho, me miro con detenimiento, meneo la cabeza y dijo..."esto es lo que hay".

Entiendo que no todo el mundo es como yo por lo que voy a explicar que la armada imperial son los malos de Star Wars, los que obedecen a Darth Vader...el asmático del casco negro, y  este ejercito tiene un destructor imperial que es así:


No me pueden negar el parecido.

NO ME GUSTA

Tengo la cabeza llena de estas cosas y si lo que decía Sherlock Holmes es cierto (sólo podemos guardar un número limitado de conocimientos en el cerebro y que cuando se llena hay que olvidar unas cosas para guardar otras)...estoy cerca de ser idiota porque no me puede quedar mucho espacio para conocimientos útiles.

Aunque no creo que sea idiota, pero es raro que la gente sepa en que grupo le catalogan. Un friki por regla general (yo si) no se considera friki, un pijo no se considera pijo y un idiota no se considera idiota. Hay que añadir que el pertenecer a un grupo no te excluye de los demás... puede haber frikis pijos, pijos idiotas, idiotas frikis y frikis pijos incluso puede haber un pijo friki idiota.

Yo de momento se que soy friki, lo de idiota...bueno si están leyendo esto pueden intuir que estoy cerca pero todavía no lo asumo y pijo...no lo soy. Si duermo con sabanas de seda es porque mi piel es muy delicada y lo de las almohadas de plumas de ganso separadas una a una y a mano es por una cuestión de comodidad, me gustan los hoteles y restaurantes caros, pero es que ya estoy mayor para incomodidades y me encanta que me hagan la pelota...bueno quizás soy un poco pijo.

Me gusta...conocer la secuencia.

martes, 15 de julio de 2014

ME GUSTA

La semana que viene me voy de vacaciones a Lanzarote. Momento para desconectar del trabajo, descansar y disfrutar de la familia.


Desde que tengo niños esa semana que marchamos de relax se traduce en esta secuencia:

1.- Viajar muy ilusionados
2.- Los niños se lo pasan muy bien
3.- Los niños se portan fatal
4.- Me enfado hasta los límites de lo humanamente posible.
5.- Creer que la vida es un infierno y que se esta mejor trabajando.
6.- Comprendo que los niños están sobre-excitados y agotados y eso los lleva a ser incontrolables
7.- Me relajo...y se acaban las vacaciones.

No son las vacaciones mejor planeadas del mundo pero si que son constantes y año tras año esta secuencia se repite. Teniendo en cuenta que lo desconocido me incomoda y disgusta estoy encantado de saber que en una semana voy a estar enfadado con el mundo. Llamenme raro si quieren, pero a mi saber cuando me voy a enfadar me deja más tranquilo, me enfado mucho mejor de esta forma.

NO ME GUSTA

Se estarán preguntando que si ya  lo sé porque no aprendo de un año a otro y paso directamente al punto 6.

Se puede hacer pero entonces le quitaríamos emoción a las vacaciones y entraría en una zona desconocida y como he dicho un poquito más arriba, lo desconocido me incomoda y disgusta.

Así que me voy de vacaciones al infierno...pero es mi infierno y me encanta. Por otro lado el infierno con barra libre, sol y playa es más llevadero.

¡Es verdad, dibujito! Se me olvidaba decir que, con éste, ya hemos escrito 200 posts. ¡Cuántas cosas teníamos que contar!...y las que nos quedan.¡Cómo nos gusta hablar de nosotros mismos!